sábado, 26 de mayo de 2018

Bocaditos de plátano y limón con cobertura de queso

Cuando una receta improvisada sale bien, una siente una felicidad enorme y unas ganas incontenibles de contárselo a todo el mundo. 

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Es justo lo que sucede con esta receta de bocaditos de plátano y limón con cobertura de queso, una reparación que nació de buscar que hacer con tres plátanos maduros que dieron origen a un postre sensacional tras el cual ninguna merienda volverá a ser.

Ingredientes

(30 unidades)

• 210 gr de Mantequilla (a temperatura ambiente)
• 300 gr de Azúcar
• 2 Huevos
• 125 gr de yogur de limón
• 3 Plátanos maduros
• 10 ml de Esencia de vainilla
• 5 gr de Levadura química
• 250 gr de Harina de trigo
• Sal
• 300 gr de queso crema
• 100 gr de azúcar glasé
• 1 Gelatina en láminas

Preparación:

Pelamos los plátanos y los machacamos con un tenedor. Reservamos. En un cuenco amplio, batimos 110 g de azúcar, la mantequilla y los huevos hasta blanquear. Agregamos el yogur, los plátanos y la mitad de la esencia de vainilla. Batimos de nuevo hasta obtener una masa homogénea.

En otro recipiente mezclamos la harina junto con el impulsor químico y un pellizco de sal. Lo incorporamos al cuenco con la masa de plátano y yogur y removemos con suavidad hasta que todos los ingredientes se hayan mezclado bien. Vertemos la mezcla en un molde forrado con papel sulfurizado y cocemos en horno a 180 ºC durante 30-35 minutos.

Retiramos del horno y dejamos atemperar antes de cubrir el molde con papel film (o una bolsa de plástico) e introducirlo en la nevera para que tome consistencia durante, aproximadamente, dos o tres horas. Mientras tanto, batimos el queso crema con el resto de la mantequilla, la otra mitad de la esencia de vainilla y el azúcar glasé.

Hidratamos la lámina de gelatina en un cuenco con agua fría durante 10 minutos. Retiramos el agua y calentamos la gelatina en el microondas durante 15 segundos, lo suficiente para que se funda. Le agregamos dos cucharadas de la mezcla de queso y removemos. Ahora hacemos a la inversa y agregamos la mezcla de la gelatina a la del queso y batimos de nuevo hasta homogeneizar. Introducimos la mezcla en una manga pastelera y la dejamos reposar en la nevera durante una hora.

Cuando el bizcocho base esté listo y haya tomado cuerpo lo desmoldamos y cortamos en cuadrados. Decoramos cada porción con la cobertura de queso crema que tenemos en la manga pastelera, haciendo las formas que nos gusten. También podemos extender la cobertura por toda la superficie antes de cortar. Si queremos, podemos decorar con almendra crocante.

Fuente: Directo al Paladar

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